(1957-)
Fue asesor de ACDE desde el 31 de marzo de 2006 hasta el 31 de diciembre de 2012.
“Si Dios creó al hombre a su imagen y semejanza, no lo creó en vano. Evidentemente lo creó para invitarlo a seguir la tarea de la creación junto con él. Esto es lo que normalmente en círculos católicos se llama la dignidad de ser cocreador, una suerte de joint venture, y el hombre aparece como un partner de Dios. Ahora, esta invitación está en lo profundo de cada uno de nosotros. Se trata de un llamado que surge en nosotros, y este llamado en realidad es el lugar desde donde yo me puedo proyectar, y allí están contenidas las posibilidades que dan sentido a toda nuestra vida. La vocación en realidad es una promesa divina, solamente que tengo que ir al encuentro de ella. Es como la raíz sin la cual no nos sostenemos. Es lo que nos arraiga a una historia, a un destino, a un lugar, a unos vínculos. Es en todo eso donde se juega nuestra identidad más común, nuestra dignidad, nuestra posibilidad de ser humanos. Eso es lo que yo llamo la pertenencia. La vocación, para mí, es una pertenencia. Y esta pertenencia en primer lugar, para nosotros, es pertenecer a este sueño que Dios tiene sobre cada uno de nosotros, que está contenido en este hecho de habernos creado a su imagen y semejanza”
Parte de la exposición del padre Llorente en el Encuentro anual de ACDE 2009.
Su historia
Alejandro Carlos Llorente nació el 30/12/1957 en la ciudad de Buenos Aires y conoció ACDE desde su misma cuna, ya que era hijo y nieto de socios fundadores: el ex presidente (1962-1964) Carlos Saturnino Llorente Carbonell y Saturnino Llorente Torroba, respectivamente.
Es ex alumno del colegio Cardenal Newman en el que cursó su escolaridad primaria y secundaria.
Se ordenó como sacerdote del clero secular de la Arquidiócesis de Buenos Aires el 6/12/1986 y obtuvo el Doctorado en Teología de la Universidad Gregoriana de Roma. Fue profesor de ética de la vida y ética económica en la Facultad de Teología de la UCA, desde el año 2000 y hasta 2012.
Es desde 2013, el párroco de la iglesia Ntra Sra de la Merced (declarada Monumento Histórico Nacional) en la que estuvo como vicario parroquial desde el año 2000.
Preparando la sucesión del padre Rafael Braun, se incorporó a ACDE como su vice-asesor el 13/9/2005. Fue precisamente en 2005, que el entonces Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Bergoglio, lo designó Perito teólogo de la causa de canonización de Enrique Shaw.
