Nació el 20-9-1917, en Buenos Aires y falleció en 1888, a los 70 años. Sus padres eran Matías Serrano y María Mourón. Estaba casado.
Abogado egresado de la Universidad de Buenos Aires, fue dirigente nacional de la Acción Católica Argentina y se formó en los Cursos de Cultura Católica de los años ´30, que constituyeron el germen de la futura Universidad Católica Argentina.
Desarrolló la actividad empresarial a lo largo de toda su vida, fue accionista y administrador de varias empresas (presidente del Directorio de Solían, de la Compañía Interamericana de Industria y Comercio y de los Establecimientos metalúrgicos Uspallata, entre otras), fue promotor de la creación de la Cámara Argentina de Sociedades Anónimas en 1953 y luego sería su presidente. En este rol, tuvo activo protagonismo en la creación de la que hoy es la Universidad Argentina de la Empresa (UADE). Al momento de morir, era el primer presidente de la recientemente fundada Cámara Argentino-China de Industria, Comercio y Producción (período 1984-1988).
Fue presidente de la Cía “Solián” de industria y comercio; Director de Samerco y presidente de los establecimientos metalúrgicos “Uspallata”.
Con todo lo importante que fue su actividad empresarial y su compromiso con la formación universitaria, lo que sobresale en la vida Basilio Serrano, es su militancia y compromiso para encontrar (de manera infructuosa) una construcción política que permitiera el acceso al poder de sus ideas, siempre vinculadas a lo que podríamos denominar el nacionalismo católico.
En esa búsqueda, adhirió a la revolución de 1943 como ministro de Hacienda y por un breve lapso, Gobernador de Corrientes. En las elecciones de 1946, como miembro de la Alianza Libertadora Nacionalista, adhirió a la candidatura presidencial de Perón siendo candidato a diputado nacional de una lista que encabezaba el sacerdote Leonardo Castellani.
De su adhesión inicial al peronismo, pasó a la oposición más activa cuando se produjo el conflicto entre Perón y la Iglesia. Pero el giro liberal que tomó el gobierno, luego de la revolución de 1955, constituyó para él, una nueva decepción. En 1957, se propuso trabajar en la construcción de un frente amplio de perfil cristiano que pudiera competir con éxito en las elecciones. Mantuvo negociaciones con los principales líderes políticos de la época, tales como Arturo Frondizi, Vicente Solano Lima y Alejandro Leloir. Llegó incluso a promover la candidatura de un empresario católico exitoso, ex compañero de dirigencia en la Acción Católica: Carlos Pérez Companc. Sin embargo, las negociaciones no llegaron a buen puerto y decidió presentarse él mismo como candidato presidencial, obteniendo apenas 13 mil votos (0,16% del padrón).
Volvió a intentar sin éxito reunir al pensamiento cristiano de cara a las elecciones de 1963 y como parte del Movimiento de Acción Nacional, se integró al FREJULI en las elecciones de 1973, para acompañar el regreso de Perón al poder.
En 1981, se unió a la Democracia Cristiana y trabajó en la refundación del partido. Quizás su última actuación relevante en política fue acompañar a Carlos Auyero y Augusto Conte en la representación de su partido en la Multipartidaria convocada por el gobierno militar para la transición democrática.
Luego de su muerte y como buena corona para una vida tan intensa y comprometida en ámbitos tan diversos, la UADE reconoció su trayectoria creando en 1991, la Cátedra de Ética “Dr. Basilio Serrano”, con la misión de proveer a la formación de los alumnos, en el campo de la ética, aplicada especialmente a la labor profesional y a los negocios.
