2001

Enrique Shaw es declarado Siervo de Dios

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El 27 de mayo de 1997, ACDE solicita ser considerado formalmente como Actor de la causa, y se ponen en marcha las gestiones propias de la «etapa preliminar» a la apertura del proceso de Canonización.

El 13 de octubre de 1999, el Arzobispo de Buenos Aires, S.E.R. Jorge Mario Cardenal Bergoglio da el visto bueno al Postulador designado por ACDE, Lic. Juan Luis Mario Cavo. El 16 de noviembre, se constituye un Tribunal Eclesiástico «ne pereant probationes» para las declaraciones testimoniales.

En enero del 2000, Monseñor Mario A. Poli presenta el parecer teológico de las obras escritas de Enrique Shaw.

El 18 de abril de 2001, el cardenal Jorge Bergoglio realiza positivamente la consulta a los señores obispos sobre la oportunidad de iniciar la Causa de Beatificación de Enrique Shaw. El 26 de junio, el mismo Arzobispo designa una comisión de peritos en historia presidida por Monseñor Mario A. Poli, e integrada por el Prof. Enrique M. Matochi y el Pbro. Carlos A. Costa, para recoger todos los escritos inéditos y los documentos históricos, sean manuscritos o ya publicados, que se relacionen con la Causa.

El 16 de julio de ese año, el cardenal Bergoglio peticiona el «nihil obstat» a la Congregación para las Causas de los Santos en Roma. El 25 de septiembre, el cardenal Saraiva Martins, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos envió el «nihil obstat» para la causa de beatificación y canonización del laico fiel a Cristo y padre de familia Enrique Shaw. Esto significa que no hay ningún obstáculo en los dicasterios romanos, para la causa mencionada.

Monseñor Poli definió a Shaw como “un hijo de la Iglesia y testigo de la Fe” con una “amplia cultura humanística” que vivió de manera intensa sus 41 años de vida, siendo “ejemplo de amor a Dios y al prójimo”. Lo recordó como “un laico comprometido en numerosos servicios de la Iglesia en su época” y fue quien encaró “la Doctrina Social de la Iglesia como inspiración en su quehacer empresarial”.​